- Especialista del Hospital Clínico Veterinario de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UdeC entrega algunas ideas que pueden ayudar al tutor en este proceso.
“¿Imagínate si nosotros no nos laváramos los dientes todos los días?… lo mismo pasa con las mascotas”, así de precisa es la respuesta que entregó la Dra. Yessica Muñoz, del Hospital Clínico Veterinario de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción, al consultarle si es necesario con lavar los dientes de los perros y/o gatos.
Para la médico veterinaria la limpieza bucal es trascendental no solo porque se evitan las enfermedades periodontales, sino que otras de mayor complejidad como las patologías, renales o cardíacas. “En el caso de los perros y los gatos, la enfermedad más común es la enfermedad periodontal. Hay estudios que demuestran que los perros de 4 años tienen un 80% de posibilidad de tener enfermedad periodontal y en los gatos un 60%. Entonces es muy importante la salud dental de nuestras mascotas”.
Aunque muchas personas descuidan este aspecto de la salud de sus mascotas, la Dra. Yessica Muñoz señala que lo ideal es cepillar sus dientes, pero que también existen varias alternativas. “Considerando que hay mascotas que no son muy cooperativos con el tema de la boca, hay otros instrumentos que sí se pueden utilizar, por ejemplo, hay juguetes que están hechos para la limpieza dental, hay algunos productos como geles, hay algunos snacks que también funcionan bastante bien, pero lo ideal es el cepillado”.
Debido a esto último es que aconseja que el lavado de dientes se les enseñe desde que son pequeños. “En los cachorritos cuando vienen a sus primeras consultas, incentivamos al tutor a que hay que cepillar los dientes de su mascota y que la idea es que sea algo divertido para el perro y/o gato. Al inicio se aconseja usar alguna pasta de dientes que vienen con sabor a carne, entonces generalmente les agrada. Además, hay que tener claro que existen cepillos para perros y otros cepillos para gatos y lo que se recomienda es que por lo menos se haga una vez al día”.
Agrega la experta que debido a que las personas descuidan mucho la salud bucal de sus mascotas, generalmente llegan cuando son temas mayores. “Por esta razón es que hoy generalmente uno cuando está haciendo un chequeo general, les dice a los tutores que deben ocuparse también de los dientes de su mascota sea un cachorrito o una mascota adulta y también los concientizamos que hay razas de perro o gatos que necesitan con mayor frecuencia el cuidado dental. Por ejemplo, los perros braquicefálicos (que tienen un hocico achatado, como los pug o los bulldog), sí o sí tienen problema dentales, por su conformación ósea. Tienen siempre los dientes muy desordenados o con mala mordida, por lo tanto, deben hacerles chequeos anuales. Lo mismo con las razas ‘Toy’ como los poodles, los chihuahuas o los Yorkshire, que tienen los dientes mucho más grandes en relación con el tamaño de su cráneo, entonces acumulan mucho sarro”.
Dentro de las enfermedades periodontales que pueden presentar las mascotas la doctora destacó que pueden llegar con alteraciones locales, por ejemplo, caída de dientes, fractura de mandíbula o infección de hueso. “Al comienzo de la patología dental no hay signos clínicos evidentes, pero una vez la enfermedad progresa, comienza a existir perdida de los tejidos de soporte del diente, que son el ligamento periodontal y el hueso, por lo que ese diente va a estar suelto y se terminará por caer, pero en todo este proceso la macota está con dolor”, precisó.
En este contexto la Dra. Muñoz explicó que la razón principal por la que hay que estar pendiente de la salud bucal de las mascotas pasa porque puede derivar en patologías de mayor complejidad. “Sí tenemos una gran carga bacteriana dentro de la boca, esas bacterias constantemente están migrando al resto del cuerpo, llegando al corazón, al hígado, a la vejiga, a los riñones y éstas van generando enfermedad sistémica”.
Para evitar este tipo de situaciones es que las mascotas, al igual que sus tutores, deben tener una rutina de cuidado bucal, que incluya a lo menos una vez al año una consulta dental profesional.
Por Francisca Olave Campos
