Tras cuatro meses de tratamiento dan de alta a último equino quemado en incendios forestales de Ñuble

  • La yegua “Inquieta” sufrió heridas en el 60% de su cuerpo cuando el fuego se propagó a gran velocidad por el sector Paso Hondo, en Quillón. El trabajo mancomunado de UdeC, Ejército y SAG, con el apoyo de Colmevet, permitieron la recuperación de los siete equinos que fueron hospitalizados de urgencia en febrero.

 

Casi cuatro meses permaneció hospitalizada la yegua “Inquieta” en el Hospital de animales mayores de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción. El 60% de su cuerpo resultó quemado en los incendios forestales que afectaron a la Región de Ñuble en febrero pasado y durante 60 días necesitó cuidados las 24 horas para avanzar en su recuperación, permitiendo que hoy regresara a su hogar en el sector Paso Hondo de la comuna de Quillón.

El Secretario Regional Ministerial de Agricultura de Ñuble, Antonio Arriagada, destacó que este hito con el que se pone término a la recuperación de los equinos quemados en los incendios forestales, es un símbolo de esperanza.

“Cuando ocurren estos siniestros se pierde todo; una vida de esfuerzo y los recuerdos; se quema la casa y los cultivos. El poder recuperar a un animal de trabajo o a una mascota da esperanza y eso es lo que se pudo lograr, con el esfuerzo tan importante de los colegas. Tal como dijo el Presidente Boric, tenemos la oportunidad de salir de este siniestro con una mejor región”, sostuvo.

Las graves lesiones que sufrieron siete equinos motivaron que la UdeC, el Servicio de Veterinaria del Ejército y el Servicio Agrícola y Ganadero establecieran una verdadera unidad de cuidados intensivos, donde especialistas de las tres entidades trabajaron de lunes a domingo. Cerca de 5 kilómetros de vendajes, mil litros de suero para terapia de hidratación y hasta 100 litros diarios de suero para lavar a cada animal fueron necesarios para estabilizar y recuperar a los equinos, además de medicamentos, insumos y alimentos.

“Para nosotros es la etapa culmine de un proceso que fue bastante difícil y duro cuando estaban ocurriendo los incendios. El poder aportar y coordinar como Servicio Agrícola y Ganadero a la recuperación de los animales quemados ha sido importantísimo y hoy nos llenamos de felicidad y orgullo porque estamos entregando a la yegua Inquieta en buenas condiciones a sus dueños”, valoró Gloria Cuevas, directora regional subrogante del SAG de Ñuble. También hizo un reconocimiento a la Municipalidad de Quillón que comprometió el apoyo al tenedor del animal con insumos y atención médico veterinaria.

El caso de “Inquieta” fue de alta complejidad. “La yegua tenía un 60% de su cuerpo quemado. La cabeza, cuello, las extremidades y, lo más doloroso, la zona abdominal y la zona perianal. Con el trabajo que hicimos en conjunto con el Ejército y el Servicio Agrícola y Ganadero, en el día número 60 la pudimos tener estabilizada y, de ahí en adelante, la mantuvimos para que mejorara sus cicatrices y recuperara el pelo”, explicó el doctor Ignacio Cabezas, director del Hospital de Animales Mayores de la UdeC.

Los aportes de diversos organismos públicos, así como las donaciones de ONGs, instituciones privadas y particulares, administradas por el Colegio Médico Veterinario, permitieron costear los tratamientos.

“Este proceso constituyó un hito en la relación cívico militar, dado que lograron integrarse las capacidades tanto gubernamentales, de ONGs, de la Universidad de Concepción y del Ejército de Chile, que puso a disposición de la recuperación de animales mayores y menores a médicos veterinarios y enfermeros de veterinaria provenientes de distintas ciudades de Chile, logrando de esta forma una integración que tuvo como resultado la recuperación de muchos animales, entre ellos la yegua “Inquieta”. Tengo la convicción que la abnegación y la entrega de los veterinarios y enfermeros que dieron lo mejor de sí en este largo proceso es un recuerdo que quedará en Ñuble, Biobío y la Araucanía”, comentó el teniente coronel Miguel Moya, jefe del Servicio de Veterinaria del Ejército de Chile.

Los profesionales de las tres instituciones continuarán efectuando visitas médicas de seguimiento a los animales atendidos que sufrieron heridas más graves, como fue el caso de Inquieta de Quillón, Chamuscado de Yungay y Spirit de Tomé.